Somos lo que decimos, lo que hablamos. Rafael Echevarría demostró que hablar es una acción activa y no pasiva y por tanto, cuando hablamos generamos acciones y eso es una acción activa y al haber una acción implica una transformación. Por tanto:
La lingüística es activa
El modelo de intervención COECO (coherencia y ecología), el cual se basa en las 5 dimensiones de la persona, distingue el SER y el HACER:
- SER: Recibo una emoción (nos entra por el estómago), pienso que me pasa con eso que siento, le pongo un nombre para poderlo nombrar. Intervienen las partes:
- Emocional
- Mental
- HACER: Al nombrar lo que me pasa, lo puedo verbalizar y si lo verbalizo y actúo, lo puedo cambiar. Intervienen las partes:
- Lingüístico: provoca acciones
- Actuación: provoca cambios para hacer tangible aquello que quiero cambiar.
Hay que verbalizar lo que sentimos así que:
Hoy sabes que:
- Cuanto más vivas como sientes, menos dolor sientes como vives y menos te arrepientes de lo que vives porque lo vives desde tu interior (esta frase nos invita a verbalizar lo que sentimos). Por tanto, cuanto más vivas con tu mente, más dolor sentirás en un futuro.
Pues aprende a que:
- Cuanto menos piensas lo que dices, más dices lo que piensas. Si te paras a pensar lo que deseas decir, lo estás construyendo, probablemente sea una mentira o esté muy lejos de lo que tú eres.
- Las Afirmaciones
- Los Juicios
- Las Declaraciones
- Las Promesas
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